El principio del fin de la Patrulla-X

Tras disfrutar como nunca con el revelador fin de fiesta que nos había propuesto Joss Whedon en su etapa al frente de ‘Astonishing X-Men’ junto con un John Cassady esplendoroso a los lápices, ‘Uncanny X-Men’ y ‘X-Men’ pasaron a un lugar secundario más si cabe teniendo en cuenta las etapas que estaban viviendo a nivel de editorial.

Hay que recordar que fueron buenas intenciones que acabaron pervirtiéndose de algún modo para que en realidad no cambiase nada. ‘Uncanny X-Men’ la tenía Claremont, que sí había logrado devolver cierta gracia a sus historias... hasta que acabó con la saga del ‘Fin de los Grey’ y exasperante se puede calificar el último tramo de la trayectoria del guionista por la colección. ‘X-Men’ comandada por Milligan, parecía haber heredado el mal gusto de su predecesor por según que temáticas y la franquicia empezó a estar seriamente dañada a partir de entonces.

¿Es en cierto modo a causa de una dejadez editorial? Hay que reconocer que las series vengadores empezaban a tener cierta relevancia y más teniendo en cuenta los contratos que empezaban a moverse de cara a la producción de una franquicia en la gran pantalla.

De ahí nació ‘Dinastía de M’, saga que erradicó de la ecuación Marvengativa de un plumazo todo lo establecido por Morrison quien había conseguido dotar a toda la franquicia de una frescura sinigual. Con la población de la raza mutante nacería la esperanza editorial...

Brubaker había llegado por la puerta grande de la editorial, encargándose del relevo de Bendis al frente de Daredevil. Su prueba de fuego llegó con el ansía editorial por celebrar el trigésimo aniversario de la aparición del ‘Giant Size X-Men #1’ y decidió contarnos un capítulo perdido de esta historia. A través de la retrocontinuidad estableció un grupo perdido entre las dos Patrullas-X que acabó malparado y del que sobrevivieron Vulcano y Darwin, dos interesantes aportaciones que han tenido sus menos y sus más. Para rematar faenas, ya resolvían el misterio del tercer hermano Summers. Esto hizo que se ganara el ascensco a ‘Uncanny X-Men’.

 

El autor sabía de los planes de la editorial de llevar a cabo el megaproyecto de ‘Civil War’, por lo que decidió llevarse a su Patrulla-X al espacio para reconectar con el viejo lector y mostrar al nuevo quiénes eran los amos del espacio hace treinta años. En ‘X-Men’ entraría Mike Carey con un equipo de lo más singular, pero todas las historias parecían cohexionarse entre ellas. Sin embargo, aún estaba por ahí ‘Astonishing X-Men’ siempre considerada la ‘principal’ por haber contado con el protagonismo de Scott y Emma, liderando a Lobezno, Gatasombra, Bestia y a la joven Hisako. ‘New X-Men’ ganó en carisma al estar más interconectada y presentar una historia más adulta. ‘X-Factor’ nació en medio de todo el barullo y supo plantar cara...

Mientras tanto la colección de Brubaker contaría con un equipo de lo más singular compuesto por Charles Xavier, Rachel Grey, Rondador Nocturno, Kaos, Polaris, Sendero de Guerra y Darwin, una de las últimas ‘resurrecciones’ de ‘Génesis Mortal’. El periplo les llevó a una gran space-opera con traiciones, maquinaciones, guerras, batallas, muertes, resurrecciones, regresos... Un año entero en el que las cosas no volvieron a ser nunca como lo fueron. Con el regreso del grupo a la Tierra, quedarían Charles Xavier, Rondador Nocturno, Sendero de Guerra y Hepzibah, una interesante incorporación que aprovecharía el bueno de Bru en el siguiente arco que nos traería de vuelta a Tormenta, que por aquel entonces estaba enrolada con ‘Los 4 Fantásticos’. Esta saga, al igual que la que Carey y Christ y Yost estaban haciendo en sus respectivas colecciones, enlazaba todo hacia lo que se convertiría en el primer crossover mutante entre colecciones desde hacia años. Nacería ‘Complejo de Mesías’, que supondría el fin de la etapa de Joss Whedon en ‘Astonishing X-Men’, pese a que se publicó a la par. La nueva situación alinearía las colecciones de tal manera que del fin del crossover ‘Uncanny X-Men’ volvería a coronarse como la gran colección a seguir.

Brubaker para ello decidió llevar a la Patrulla-X por otros parajes más soleados, destino San Francisco. En una saga dibujada por Mike Choi, quien ya había demostrado su buenhacer en la secuela de la miniserie de ‘X-23’, Cíclope y Emma viajarían a San Francisco dónde los mutantes por fin tendrían un lugar en el que refugiarse, una ciudad que por fin no los consideraría proscritos. Es por ello por lo que nació una nueva etapa editorial a modo de celebrar el número #500 de la colección.

Brubaker pasaría a compartir guiones con Matt Fraction, su compañero en Iron Fist. El número especial de ‘Uncanny X-Men’ fue un mano a mano, tanto de los guionistas como de los Dodson y Land, quienes se encargarían de los dibujos. La nueva situación de la Patrulla-X iba a ser revolucionaria en los cómics…

Pero tras tres números, Brubaker se bajaría del carro para preparar otros proyectos editoriales… ¿Vengadores Secretos? Por lo que se despidió sin hacer mucho ruido ya que todo lo removido lo había hecho con su compañero Fraction quien daría a la serie un tono bastante singular.

 

La intrascendencia de los arcos se sucedían, aunque hay que reconocer que leída del tirón gana mucho porque es un gran macroarco y es que a lo mejor resulta difícil ver esta serie como la principal teniendo en cuenta que existe ‘Astonishing X-Men’. La serie empezó a convulsionar cuando entró en faena con Osborn y sus Vengadores Oscuros. Hay que reconocer la labor entre Bendis y Fraction o al propio Fraction ya que fue él mismo quién se encargó de todo el crossover. Para crear un crossover distinto y bastante bien resuelto. Lo que era un plan de doce números, fue el legado dejado por Brubaker y por fin Fraction era libre para explorar la guerra que estaba sucediéndose desde que nació la bebé mesías. ‘Utopía’ venía a convertirse en una alegoría de la antigua Genosha y más teniendo en cuenta todo el reparto con el que contaba la colección, ya que todas las tramas secundarias de otras series tendrían constancia en la principal, ‘Uncanny X-Men’. Peligro, Fantomex, Magneto, Kitty, los mutantes renacerían de un letárgico sueño convirtiéndose en un gran ejercito dispuestos a morir por la causa bajo el mandato de un único general, Scott Summers, ya que incluso Charles Xavier y Magneto se postran a sus órdenes.

‘Advenimiento’ volvería a reunir las colecciones presentes en un crossover que suponía el regreso de Hope Summers a nuestro tiempo. La colección de Fraction siguió imparable en cuanto a su portentosa situación ya que tras la saga nacerían cinco nuevos mutantes y se encargaría de presentarnoslos en una saga que abrió un spin-off directo, ‘Generación Hope’, guionizador por Kieron Gillen. El guionista ya había hecho sus pinitos y ahí tiene su ‘Astonishing X-Men: S.W.O.R.D.’

La nueva serie de los jóvenes alebines ofrece sobre todo frescura. No malinterpretéis estas palabras, ya que los personajes que presenta son referitos de antiguos personajes, aunque resulta frescos e interesantes y más teniendo que Hope es la protagonista y el tema Fénix anda coleando a través de la pelirroja.

Gillen se ganó a pulso el ascenso al igual que hiciese ya en su momento Fraction con Brubaker, Gillen se subió al carro con el canto del cisne del guionista en la franquicia que resolvería argumentos pendientes anteriores al crossover que traería a la pelirroja de vuelta a ‘Utopía’. Tal vez por ello el tono de la serie y los dibujos de Greg Land tal vez no hayan sido los más indicados al intentar vendernos esta nueva Patrulla-X con series satélites bastante más potentes hasta el momento como lo habían sido ‘X-Force’ o la nueva ‘Uncanny X-Force’ o como vendían a nivel editorial el lanzamiento de los ‘X-Men’ de Gischler como si se tratase de otra franquicia que acababa de pasar por un crossover y estaban dedicándose a ¿las consecuencias?

  A partir de mañana en vuestras librerías podréis encontrar el Patrulla-X  #72 que contiene el número #534.1, iniciativa orquestada en Marvel para atraer nuevos lectoras que quieran sumarse al carro y hay que reconocer que es buena oportunidad ya que Gillen ha devuelto cierto carisma a las historias que hace querer seguirlas. En primer lugar deleitándonos con este primer número con un Magneto como protagonista poniéndonos al día de todos los sucesos acaecidos en los últimos años. Comentar que aquí vemos la primera colaboración entre el guionista y el dibujante Carlos Pacheco, quien también se encargará de la resurrección del título tras finalizar en ‘Cisma’. La edición española se complementa con el primer número de cuatro de una saga que enlaza directamente con uno de los conceptos creados por Whedon, ‘Breakworld’ regresa y lo hace para finiquitar asuntos con Kitty y Coloso, quién recordemos se proclamó Gobernador del mundo alienígena…

Tras la saga de Breakworld, la colección tendrá sus momentos definitorios en relaciones para meterla de lleno en el crossover ‘Miedo Encarnado’ que nos traerá de vuelta a un viejo conocido de la franquicia mutante con poderes difíciles de vencer por el ejército formado por el bueno de Summers. Esto nos enlazará directamente con la miniserie ‘Cisma’ y Gillen se encargará tanto del epílogo, que se produce en ‘Uncanny X-Men’ como en ‘Regenesis’.

El nuevo volumen de la colección ‘Uncanny X-Men’ ha empezado con buen pie, ofreciendo una acertada y al a vez desconcertante situación ante lo que representa el nuevo equipo ‘Extinción’ de Cíclope. Mientras que el legado de Charles Xavier lo hereda Lobezno en el Instituto Jean Grey al otro lado del país. 

Hay que reconocer que es una buena oportunidad para aquellos indecisos sobre si volver o no a los mutantes desde la marcha de Whedon o el último crossover mutante... tendréis que juzgarlo vosotros mismos pero en realidad los fans de 'Uncanny X-Men', no podemos quejarnos porque hemos tenidos años constantes y con grandes historias ríos que hemos ido viendo crecer como la de Sebastian Shaw, Sublime, la redención de Magneto, el regreso de Kitty, Hope Summers y las Cinco Luces, el nuevo papel de Cíclope como líder indiscutible, Utopía, Lobezno mlaherido ante las creencias de Scott, el Vacío, un gran trabajo del personaje de Emma Frost que la pone al nivel de lo realizado por Morrison y Whedon, aunque tal vez con más ahinco en las relaciones que establece con Namor y ese triángulo amoroso nunca antes visto.