Panini publica justo este mes la conclusión de ‘Patrulla-X: Cisma’, uno de
los últimos eventos que más a afectado a los mutantes. Fijaros si es el punto
que ha conseguido que ‘Uncanny X-Men’ fuera relanzada desde un primer número a
consecuencia directa de lo leído en esta miniserie autocontenida en los dos
últimos de la edición española, ya que los dos primeros contienen el insípido
prólogo orquestado por Paul Jenkins con dibujantes de primera plana a tener en
cuenta pese a que la historia no ayude.
Jason Aaron se encarga del ‘Cisma’ideológico
que se produce entre Cíclope y Lobezno, junto con dibujantes como Carlos
Pacheco, Frank Cho, Daniel Acuña, Alan Davis y Adam Kubert en respetivo orden.
Cíclope acude junto con Lobezno a una conferencia internacional sobre armamentos en pos al desmantelamiento del antiguo programa de centinelas
antimutantes. Pronto estalla un revuelo en la conferencia ante la presencia de
Quentine Quire que desata una situación de caos que llevará a la Patrulla-X ha
convertirse de nuevo en miembros de una sociedad que les teme y los odia, o al
menos nos recuerdan que el peor enemigo de los mutantes no son los villanos
sino el propio hombre y ese miedo visceral que solemos sentir a lo desconocido.
El ataque terrorista del joven rebelde Quire hace que la tensión entre Cíclope
y Lobezno aumenta de manera exponencial hasta que llega el momento de otorgar
un sacrificio argumental para crear la chispa incendaria que llevará a los dos
protagonistas del evento a enfrentarse en una espectacular lucha iniciada por
Alan Davis y dibujada espectacularmente por Adam Kubert ofreciendo una de las
mejores batallas que servidor ha podido leer.
La historia también presenta a la nueva versión del Club Fuego Infernal,
dónde Jason Aaron parece querer hacer su
propia coña a los Millar al incluir a
niños que no llegan a la secundaria como los nuevos rostros del mal y al igual que los viejos estos odian a los mutantes y tienen un plan a largo plazo. Fijaros en el final y a ver si alguien saca las mismas conclusiones que yo, pero parece que ellos son los que han orquestado la propia 'cisma' entre los dos personajes principales.
No hay que obviar el momento de su publicación en Estados Unidos ya que
coincidió con el estreno de ‘X-Men: Primera Generación’ por lo que los
paralelismos son más que obvios como la presencia del Club Fuego Infernal; la
nueva generación de jóvenes mutantes; y el cisma que se produce entre Lobezno y
Cíclope guarda ciertos paralelismos con el que en su día tuvieron Magneto y
Charles Xavier. En cierto sentido es lo que ocurre en esta miniserie, ya que
mientras que Cíclope se queda en Utopía, Logan viaja a Nueva York dónde
construirá una nueva Mansión para que los jóvenes mutantes aprendan a coexistir
con sus congéneres y no temer al futuro.
La elección de las tramas está muy bien hilvanada y Aaron se apoya en
sensacionales diálogos que en ningún momento te hacen posicionarte en un lado u
otro de la batalla ya que tal y cómo están las cosas es normal que Cíclope ande
con esta actitud que nos han venido colando en los últimos años. Lobezno
también es coherente, sobre todo con lo narrado en su colección regular dónde
tuvo que hacer frente a la venganza definitiva de sus enemigos más acérrimos, ‘La
Mano Derecha Roja’.
La elección de los dibujantes es la más idónea pese a que la homogeneidad se
pierde pero el guionista sabe aprovechar bien sus cartas y buena muestra de
ello son las escenas que aporta en cada número dónde permite que el dibujante
se luzca a gusto y deleite de los fans más acérrimos.
Un buen punto de arranque por si te habías tomado un descanso con los
mutantes y más teniendo en cuenta de lo autoncontenido que es este evento ya
que no se cruza con ningún otro título de la franquicia permitiendo que sea muy
sencillo valorar la compra de los dos números editados por Panini por su goloso
contenido. Un fan service que hace lucir de lo lindo los grandes pesos pesados
que tiene la Casa de las Ideas y un prólogo de lo que vendrá a nivel editorial
con ‘Vengadores contra Patrulla-X’, un paso necesario para lo que está por
llegar y el futuro no podía ser más emocionante ahora con dos grupos con dos
bases de operaciones distintas y bien definidas. 8/10
En realidad en Generación X si que hay algún tie-in con Cisma pero bueno, no es necesaria su compra.
ResponderEliminarEste evento se publicó a la par que el cruce de Uncanny X-Men con Fear itself. Particularmente hubiera preferido que Cisma, por su transcendencia se hubera incluido en la propia colección de los patrullosos mientras que el cruce con Miedo encarnado se hubiera publicado en una miniserie aparte (al revés de como se ha hecho vamos).
lo que comenta mandato tiene toda la razón, porque no consigue situar cronológicamente el cruce con Miedo Encarnado, fijaos que Coloso en Cisma todavía luce su aspecto anterior al de Cyttorak. Eso me hace pensar que tengo que revisionar la saga para ver si Lobezno aparece.
ResponderEliminarmandato la inclusión de 'Generación X', aquí en España conocida como 'Generación Hope' no es lo que se llama imprescindible salvo para conocer un poco la perspectiva en la que se encuentran los jóvenes estudiantes ante la situación producida por la llama prendida entre Cíclope y Lobezno; con sus explosivas consecuencias y su posterior desbandada en dos grupos con la despedida de Idie.
ResponderEliminarSe me ha ido el santo al cielo y antes he llamado Generación X a Generación Hope. Mea culpa.
ResponderEliminarEn principio la idea de Cisma es cojonuda editorialmente: ¿Cómo hacemos crecer una franquicia (los Mutantes) sobresatura de títulos? La dividimos en dos franquicias (Mutantes de Lobezno y Mutantes de Ciclope) y listo. A ver lo que tardan en volver al estado anterior.
De momento las dos colecciones han encontrado su propio nombre y coherencia, por lo que a mí respecta espero que el experimento les dure un tiempecillo. El corte militar a lo JLA/Authority de Gillen me tiene completamente encandilado y pegado al pc, al igual que Aaron con el siguiente capítulo de su 'Lobezno' and friends y es que el autor recupera el espirítu más clásico de algunos rincones de la franquicia mutante y los combina con estudiantes que bien podrían haber salido de la mente de Morrison en su periplo en la franquicia.
ResponderEliminarEn 'Lobezno & friends' Aaron ha conseguido que cojamos cariño a los personajes. Ni siquiera el confuso dibujo de Bachallo empaña sus guiones. En el equipo Extinción hay varios personajes que parecen de adorno y ojalá Guillen sepa sacarles partido.
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